Pablo Salazar y el Stan: La tragedia pluvial en Chiapas…El desastre político.
(Se presentará segundo libro que narra la leyenda negra del huracán Stan, que dejó un millón de damnificados y que sigue siendo una asignatura pendiente,)
El próximo martes 14 de este mes de mayo, se presenta en Tuxtla Gutiérrez, el libro “Stan” la tragedia pluvial en Chiapas…El desastre político…, del autor Carlos Tapia Ramírez, su segundo libro del tema trágico que conmovió a México y en su dimensión mundial, por la relevancia de la tragedia pluvial de la entidad más pobre de nuestro país, y que sacudió muchas conciencias en aquella época por el fantasma de la corrupción. En esta segunda parte de la “Tragedia pluvial del Stan”, se explica más de cómo se manejaron los fondos estatales que por miles de millones de pesos envió el gobierno federal, personajes del mundo, y empresas internacionales y nacionales, pero que se desconoce sí verdaderamente aterrizaron en Chiapas o nunca se invirtieron para la solidaridad de al menos 41 municipios de Chipas que fueron devastados por Stan.
En su narración el autor Carlos Tapia Ramírez, a más de 18 años de la tragedia, con una nueva investigación en su segunda fase con documentos y testimonios que se vivieron durante el gobierno controvertido de Pablo Salazar Mendiguchía, presenta una crónica del fraude y saqueo de los fondos para la reconstrucción por el gobierno Salazarista en ese entonces. Un libro de 450 hojas que explican los sucesos mas relevantes de una tragedia pluvial que no se le hizo justicia, y que nunca se informó de los gastos que se invertían y que aterrizaron muchos millones de pesos en Chiapas. Con la fotografía de Pablo Salazar, en la portada del libro, el autor señala: “Artífice de la quiebra financiera del estado de Chiapas, y responsable del desvió de los fondos para la reconstrucción”.
En Tapachula, será el próximo 20 de mayo cuando se haga la presentación de un libro que le da voz a más de un millón de damnificados Chiapanecos que sufrieron en carne propia un escenario de tragedia y desdicha y nunca se atendió, sino siempre fue el mensaje del engaño y manipuleo, y sobre todo de arrogancia y de desplantes jactanciosos, y como decían los cristianos chiapanecos de aquella época, “Pablo Salazar, se burlo de Dios y lo tendrá que pagar, en el sexenio siguiente su rival Juan sabines Guerrero, lo metió a la cárcel por otros asuntos, primero al Amate y después a la cárcel en Huixtla, donde fue atormentado.
A Pablo Salazar Mendiguchía, se le recuerda como el artífice la historia negra en Chiapas también por haber promovido una “Ley Mordaza”, que no solamente atentó con la libertad de expresión, sino que encarceló a periodistas, y a muchos los persiguió hasta provocarle la muerte, y otros fueron amenazados también de muerte. Una truculenta y siniestra historia del personaje evangélico que, con poder se convirtió en un ser contrario a Dios y que hoy sigue la leyenda de los exgobernadores: El Pabliato contra el Sabinato o el Sabinato contra el Pabliato y que hoy se demostró en la pasada jornada electoral para seleccionar las llamadas corcholatas federales. Son historias que nunca terminan.
“El plan más ambicioso de reforestación para Chiapas en su gobierno”, anuncia Eduardo Ramírez.
Desde Chiapa de Corzo, se escuchó la voz sonante del candidato de la coalición “Sigamos haciendo historia en Chiapas”, Eduardo Ramírez Aguilar, quien aseguró que impulsará un significativo proyecto de reforestación en la entidad y que se le debe de dar un valor agregado muy significativo, porque resulta que la entidad más selvática y boscosa del país, con una riqueza del medio ambiente de reconocimiento internacional, donde más allá de la deforestación que sube descomunalmente la temperatura, ya vive momentos severos con el agua, y esto ya nos debe de preocupar.
Aparte que no ha ido como feria en el sexenio, pues nos quitaron 160 mil hectáreas de exuberantes tierras de bosques, como la zona de “Los Chimalapas” que pasó a poder del estado de Oaxaca; que desde la Mañanera el propio López Obrador haya reconocido que la reserva de la biosfera de Calakmul, en Campeche, es el segundo pulmón más grande del continente e incluso posiblemente del mundo, solo después del Amazonas, lo que deja afuera la Selva Lacandona que era considerada como el pulmón más grande México, dos postales que duelen como chiapanecos y que entristecen el alma por esta viacrucis en materia de medio ambiente.
Pero hay más, estamos sufriendo los chiapanecos con el monitoreo de las Principales Presas de México que realiza el Sistema Nacional de Información del Agua de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), donde al corte del 30 de abril, en Chiapas el almacenamiento más bajo lo tiene la presa Manuel Moreno Torres, conocida como Chicoasén, pues se encuentra a un 14.09 por ciento de su capacidad. Por su parte, la presa Ángel Albino Corzo, conocida como Peñitas, tiene un 25.04 por ciento de su capacidad, en tanto la presa La Angostura, se encuentra en un 35.12 por ciento de su nivel de Aguas Máximas Ordinarias. La presa Malpaso cuenta con un porcentaje de 44.81 por ciento de su nivel, mientras que la presa El Portillo II o Cuxtepeques, se encuentra a un 46.98 por ciento o sea que la sequía y las altas temperaturas que han afectado a Chiapas han ocasionado que estas presas tengan estos niveles, que comenzaron descender desde el año pasado y que ya es un peligro para nuestras nuevas generaciones.
Por eso el pronunciamiento del “Jaguar Negro” en Chiapa de Corzo, reviste mucha importancia al anunciar “que se va a impulsar un proyecto, que es el más ambicioso de Chiapas, porque no solamente tiene que ver con Chiapa de Corzo, tiene que ver con 30 municipios de Chiapas, y lo que tenemos que hacer para recuperar nuestro clima, para generar el agua bendita que no ha llovido en Chiapas, el proyecto que viene derivado de los Diálogos por la Transformación, es avanzar en una reforestación, la más ambiciosa de Chiapas, queremos llegar a 150 mil hectáreas de reforestación”.
Una noticia extraordinaria y que llama a los chiapanecos a profundizarnos mas en la conciencia social por la defensa de nuestros bosques y selvas y volver a ubicarnos dentro de la cultura de la forestación y sobre todo porque nos han dicho que tenemos el programa de viveros más grande de Latinoamérica “Sembrando Vida” ( y ya lo dijimos en este mismo espacio) con más de 400 millones de plantas maderables y frutales producidos en estos años, el cual se encuentra en Tapachula, pero parece ser que “Sembrando vida” se está llevando a otros contornos nacionales esas plantas, y no se ve que beneficie a la tierra de nuestro Chiapas.
Salvar nuestros bosques y selvas es salvar a nuestra sangre, porque son las nuevas generaciones de Chiapanecos que viven la crisis ambiental, ante lo que nos depara en el futuro con los anuncios nacionales de que Chiapas vive un fantasma de deforestación de grandes dimensiones y noticias como la de Chiapa de Corzo, hay que reconocerla y aplaudirla, y sobre todo tomar conciencia social, que es el otro llamado de Eduardo Ramírez. Es ahora o nunca salvar a Chiapas con su riqueza natural. Así las cosas.